Calidad de vida y la vulnerabilidad de los ciudadanos
La exposición crónica a la que se están expuestas las personas y el ecosistema de la cuenca sufren trastornos que pueden demorar en mostrar sus efectos. Cuando se manifiesta de forma clara en las personas también el deterioro del ecosistema esta visible. Seguramente cualquiera de nosotros no nadaría en una cuenca de una zona contaminada, ni tomaría agua del Riachuelo. Pero aquellos que al nacer o vivir desde la infancia en este entorno que está deteriorado y poluto, no saben que la exposición no muestra los efectos de un momento al otro, es más bien silencioso. Por lo cual no alcanza con saber que el agua está contaminada y que no hay que tenerla cerca, la dispersión de contaminantes ocupa áreas y lugares insospechados de los que habitan en esa zona: el suelo, los juguetes de los chicos, elementos que los chicos se llevan a la boca desde su niñez, por largos años. Esto lleva a que están sometidos a diferentes sustancias seno bióticas (toxicas) y metálicos, que recién se manifiesta...